Infracción o delito, ¿en qué quedamos?

Hay un dicho popular que dice que “el que la hace, la paga” para referirse a un tipo de castigo o para justificar la penalización o indemnización por algún descuido o torpeza. Lo que ocurre es que esa misma frase algunos la complementan con otros comentarios como, por ejemplo, dependerá de quién la hace (dicho en términos jurídicos: del autor del hecho) pero no queremos pensar mal. Un poco complejo todo este asunto pero que viene al contexto sobre una noticia que leí hace unos días en donde se comentaba que un alto cargo del Gobierno de Costa Rica, tras conducir supuestamente bajo los efectos de bebidas alcohólicas y sufrir un siniestro de tráfico negociaba su culpabilidad “a la carta”.
Al parecer, resumiendo la noticia, se reconoce que este buen hombre comete una conducción temeraria pero para que no sea juzgado ni sancionado con la suspensión o pérdida del permiso de conducir se le perdona a que realice trabajos sociales, pago a hospitales y a realizar un curso de terapia anti-alcohol con la condición de que no vuelva a conducir. Sin embargo, no sólo mantiene su historial limpio sino que además evita cualquier medida cautelar y la retirada de forma parcial o definitiva de su crédito de puntos disponibles en su permiso de conducir. Pero…, veamos más detalles
Una carretera en mal estado eleva un 34% el consumo del coche y reduce su vida

Una carretera en mal estado eleva el consumo de combustible de los vehículos en un 34% y disminuye en hasta un 25% su vida útil, según asegura la Asociación Española de Fabricantes de Mezclas Asfálticas (Asefma).
La patronal apunta además que el estado de la carretera afecta a la fluidez del tráfico para indicar que cada conductor español pierde 25 horas al año en atascos, lo que se traduce en unos costes de unos 13,4 euros por hora en viajes de ocio y de más de 26,5 euros a la hora en desplazamiento de viaje.